Tener un accidente es un hecho ya de por sí traumático y es común que surjan dudas tras este momento. Si has tenido un accidente y te preguntas qué puedes hacer y cuáles son los siguientes pasos para ponerte en contacto con tu seguro y demás, presta atención.
Qué debes hacer si tienes un accidente
Lo primero de todo es mantener la calma y actuar de manera lo más fría posible. Lo primero que tienes que tener presente es qué ha ocurrido en el accidente y la gravedad del mismo porque en función de esto tendrás que hacer una cosa u otra. Si tienes un problema de tipo administrativo sobre el parte con el otro vehículo afectado podrás llamar a la policía. Si hay algún herido que creas que puede necesitar atención médica tendrás que llamar a la ambulancia y no estará de más que también llames a la policía.
Hay que dejar claro la información relativa a la víctima y al atestado. En este sentido, víctima son las personas que han tenido el accidente en cuestión, tengan o no lesiones, y también se considera tal a los familiares que se hayan visto perjudicados por los hechos.
En el caso de que en el accidente haya heridos o muertos habrá que hacer un atestado. Se trata de un documento en el que se registran las circunstancias que han rodeado al siniestro, así como todos los datos al respecto. Este parte será redactado por la Guardia Civil de Tráfico o por la policía a la que habrá que avisar previamente.
El papel de la aseguradora
Si una persona resulta herida en un accidente, cuando acuda al hospital o centro de salud tendrá que recoger el informe médico pertinente en el que se dé información sobre el diagnóstico de la víctima, el tratamiento que ha tenido que recibir, que tendrá que seguir, en caso de que sea necesario, y si requiere hospitalización el tiempo de la misma.
Será la aseguradora de la persona que haya sido la responsable del accidente correr con los gastos sanitarios pertinentes que hayan podido derivarse de los hechos.
Rellenar el parte del seguro, una de las claves
En el momento del siniestro, en la medida de lo posible, habrá que rellenar el parte del seguro y este punto es clave. En concreto, el formulario a rellenar se conoce como el Parte Europeo de Accidentes o una Declaración Amistosa de Accidente (DAA) y tras completarlo se deberá enviar a tu aseguradora. Este parte debe recoger los detalles del accidente, así como los daños que se hayan provocado tanto físicos como sobre bienes.
¿Te corresponderá algún tipo de prestación?
Si el accidente ha sido grave puede que te corresponda algún tipo de prestación. En cualquier caso para saber este punto tendrás que informarte a través de los trabajadores sociales que serán los que puedan ayudarte en la solicitud de tus prestaciones sociales y económicas a las que puedas tener derecho al haberte visto envuelto en un accidente de tráfico. En el caso de que tu ingreso en el hospital se prolongue podrás solicitar cita e informarte en los Centros de Atención e Información de la Seguridad Social.
Si lo necesitas puedes solicitar asesoramiento psicológico y jurídico
En los casos más graves, los accidentes pueden ser experiencias traumáticas que dejan secuelas psicológicas y puede ser necesario pedir ayuda. Las compañías aseguradoras cuentan con psicológicos a los que podrás acudir. También podrás dirigirte al Colegio Oficial de Psicólogos de tu comunidad o al Área de Psicología del Tráfico y Seguridad del Colegio Oficial que esté en tu región.
Respecto al asesoramiento de tipo jurídico. Las pólizas de los seguros ofrecen cobertura jurídica y legal. A través de este servicio podrás informarte sobre la indemnización que puedes tener o que te pueden pedir, los pasos judiciales a ir siguiendo, etc.
¿Tu vehículo es siniestro total?
En el caso de que el vehículo deba ser declarado siniestro total tras el accidente de tráfico, el propietario puede pedir un resarcimiento por dos vías. La primera de ellas es a través de la reparación del vehículo, devolviéndolo a su estado previo en el caso de que la otra parte acceda a abonar la cantidad que cueste el mecánico.
Otra de las vías es mediante una indemnización por el valor venal o de mercado del coche en cuestión en función de los años que tenga y de la información que estuviera recogida en la póliza.
Sé consciente de lo que tienes contratado
Como ves, contar con un seguro es fundamental para evitar problemas mayores de los que puede conllevar tener un accidente. Escoger una buena cobertura te dará tranquilidad y te ofrecerá total cobertura ante problemas de este tipo. Si todavía no tienes claro si tu seguro te ofrece lo que necesitas, no dudes en echar un vistazo a tu póliza y repasar todas las coberturas que tienes contratadas.
Es importante que sepas por qué estás pagando y si verdaderamente es lo que necesitas. Por ejemplo aquí será importante saber si cuentas con la cobertura ante un posible caso de defensa jurídica.
Son aspectos sencillos de seguir pero que se hacen un mundo en situaciones de estrés como las que se generan cuando nos enfrentamos a un siniestro. Mantener la calma y seguir los pasos arriba descritos, en función de la gravedad del siniestro, será algo fundamental para dar el parte con éxito a la aseguradora y no tener problemas a posteriori.