5 errores comunes en alquiler vacacional

En el caso de que quieras ofrecer tu vivienda para que otros hagan uso de ella durante sus viajes, debes ser precavido y tener especial cuidado con estos 5 errores comunes en alquiler vacacional.

A estas alturas ya sabrás que una nueva forma de viajar ha cogido brío en todo el mundo. Nos referimos al alquiler vacacional que es el uso de una vivienda o propiedad para alquiler de corta estancia. Los usuarios suelen ocupar la vivienda por periodos que pueden consistir en simples días e incluso semanas. También es posible encontrarnos con estancias que llegan al mes e incluso lo superan. 

Vamos a ponerte al tanto de todos los detalles para que la experiencia de arrendar una vivienda de tu propiedad te salga redonda. Así, te animamos a que prestes atención a estos cinco apartados si no quieres cometer errores:

1. Una manera de enriquecer tu oferta es a través de servicios complementarios, como limpiezas intermedias, tintorería o excursiones. No olvides que en este caso deberás cobrar el IVA. 
2. Examina la legislación existente en torno al alquiler vacacional en tu comunidad, pues cada región cuenta con su propia normativa y puede diferir en algunos puntos. Por este motivo, es importante que te informes de todas las particularidades de tu comunidad, pero también de tu ayuntamiento que puede haber regulado algún aspecto.
3. Estudia bien cuál es la temporada alta y baja de la zona en la que se localiza el inmueble. Ten presente que conviene ajustar el precio a la mayor o menor demanda. De esta manera, nuestros precios serán atractivos y competitivos.
4. No hay motivo para renunciar por completo a la vivienda solo porque la vayamos a ofrecer en alquiler vacacional. Al respecto, si deseas hacer uso de ella durante unos días y decides publicitarla en una plataforma como Airbnb u Homeaway, únicamente tendrás que bloquear las reservas durante el intervalo en el que tengas previsto ocuparla. Así, nadie te impedirá continuar disfrutando de la finca cuando lo necesites. 
5. Estamos ante una actividad que te generará ingresos y que, por lo tanto, deberás declarar a Hacienda por Rendimientos de Capital Inmobiliario. Para ello deberás presentar modelos como el nuevo 179, que es una declaración informativa trimestral a Hacienda que afecta a las cesiones de viviendas con fines turísticos. Sin duda, es una cuestión delicada, por este motivo harías bien en pedir asesoramiento a empresas especializadas en alojamientos turísticos y/o viviendas turísticas.

Perfiles de huéspedes que usan alquiler vacacional

No podemos hablar de un perfil concreto, sino más bien variopinto en el que tienen cabida diversas clases de clientes. No en vano, el alquiler vacacional es la fórmula perfecta para una amplia variedad de huéspedes, ya que responde muy bien a sus necesidades. Vamos a analizarlos:

• Personas que viajan por motivos laborales: sus estancias normalmente no se alargan más allá de un puñado de días o una semana. Desean el máximo confort mientras se dedican a su trabajo. Suelen decantarse por viviendas que gozan de una buena conexión a internet y se encuentran bien comunicadas con el resto de la ciudad. Tienen predilección por los inmuebles situados cerca de áreas financieras, próximos a espacios de ferias o que presentan una gran concentración empresarial en la zona.
• Parejas: en este caso buscan realizar una escapada de fin de semana o durante unos días de las vacaciones y desean, ante todo, una buena ubicación.

• Familias con niños: parece que la habitación de un hotel se queda corta para atender las necesidades de quienes viajan con toda la familia. Así, les gusta disponer de salón, una cocina e incluso una terraza o jardín para disfrutar del aire libre. Este perfil de clientes busca ante todo un entorno seguro, provisto de servicios como tiendas o supermercados y, por supuesto, una zona donde aparcar con garantías, dado que la mayoría se desplaza en coche.
• Grupos de amigos: no son los clientes más habituales, pero también recurren al alquiler vacacional, puesto que les permite disfrutar de los viajes en compañía al tiempo que comparten los gastos de alojamiento.
• Los amantes de la naturaleza: mención aparte merece esta clase de turista que desea desplazarse a entornos naturales en los que desconectar. Estos viajeros buscan espacio, además de unas vacaciones sostenibles y respetuosas con el medio ambiente.

¿Cómo calcular el valor de mi propiedad?

Es cierto que no resulta fácil determinar qué precio de alquiler hemos de cobrar a los clientes que se decanten por nuestra vivienda vacacional. Estas pautas que detallamos a continuación pueden ayudarnos en esta tarea:

• Necesitamos saber cuáles son los costes fijos que tendremos que cubrir como propietarios. Estos comprenden tanto el importe de la adquisición de la vivienda, además de los gastos de amueblamiento y los de preparación para albergar a los visitantes, pero también otros adicionales, entre los que destacan los de comunidad o de suministros, entre otros.

• Tendremos que investigar el precio de los inmuebles en alquiler que existen por nuestra zona. Es importante que nos detengamos a comparar la calidad y características de estos alojamientos, sobre todo de aquellos que se asemejan al nuestro, ya sea por sus características, ubicación o por los servicios ofrecidos.
• Es aconsejable establecer estrategias como ofertas de última hora o descuentos por largas estancias, etc.
• No hay que caer en el error de creer que poner un precio más bajo que el que pide nuestra competencia nos garantizará un mayor nivel de clientes. Si resulta muy barato, despertará los recelos de los viajeros que pensarán que nuestro establecimiento no se encuentra en buenas condiciones.

Conviene, asimismo, incentivar a esos usuarios para que dejen una reseña explicando qué tal fue su experiencia. Su lectura servirá para que otros posibles interesados puedan animarse a alquilar. También podemos recibirles a la llegada y tratar de ser los mejores anfitriones, poniéndoles al tanto de todo lo que encontrarán en la zona, así como los puntos más interesantes del lugar. 

¿Qué puedo desgravarme si alquilo mi vivienda?

Aunque tendrás que declarar por los ingresos percibidos, también podrás deducir ciertos gastos en tu declaración IRPF.

En concreto, podrás hacerlo en la parte proporcional del tiempo que lo has tenido alquilado. Apunta algunos de los gastos más comunes:

• Publicidad o anuncios en plataformas online.
• Si cuentas con una hipoteca, podrás deducirte las comisiones de apertura o los gastos de formalización.
• Reparaciones o mantenimiento de la vivienda, pero no se incluyen aquí las mejoras o ampliaciones que no se consideran deducibles.
• Primas de seguros. No olvides que en algunas comunidades es obligatorio suscribir un seguro de alquiler vacacional. 
• Gastos como tasas de basura, de la comunidad, electricidad, internet, agua o IBI, entre otros.

¡No olvides guardar todas las facturas y recibos para desgravar los gastos de tu alquiler vacacional!

Sin duda, alquilar nuestra casa en verano o en cualquier momento del año puede ser de gran ayuda para nuestra economía, pero no hay que perder de vista lo que establece al respecto la legislación de la comunidad donde tienes tu vivienda.